‘El marangolotio’, de Carlos Murciano

Carlos Murciano. Ilustración de Fernando Gómez. (Pulsad en la imagen para ampliarla.)

  • Carlos Murciano, La niña calendulera. Don Abecedario. Ilustraciones de Fernando Gómez. Hiperión (Ajonjolí, 34), Madrid, 2003. ISBN 84-7517-769-7.

13 Respuestas a “‘El marangolotio’, de Carlos Murciano

  1. Enrique Cordero

    ¡Olé por el marangolotio murcianiano! Amigo Darabuc, no tengo favoritos en el arte, pero en poesía infantil me cuesta aferrarme a este principio cuado leo a Carlos Murciano. Vale que es poesía muy medida y, cabe pensar, muy meditada (recuerdo un poema de Gloria Fuertes en el que, como buena representante del postismo, se mete con ese clasicismo supuestamente anquilosado de «Los Murciano», como dice ella), pero a mí me va mucho, qué le vamos a hacer. Gracias por hacerme releerlo. Un abrazo

    • Buscaré ese poema. ¿Recuerdas en qué libro está? Estaría bien copiarlo aquí. Le tengo mucho cariño al postismo, solo que, como todas las vanguardias burlonas, aciertan en su forma (yo sigo leyendo a Ory con gusto y hace poco pensaba en elegir un poema suyo) pero no en sus vaticinios de futuro.

      De Carlos Murciano, para mí solo queda añadir que es un poeta clásico que hace buenas las formas clásicas; es de los que hace que parezcan envidiosamente fáciles. Soy de los que piensa que necesitamos más verso libre y más curiosidad y experimentación (¿quizá la mitad de los versos para niños son romances?), pero en ningún caso como excluyente de una forma de hacer poesía que, si ha durado tantos siglos, será por algo…

  2. Hola Darabuc:

    Estoy de acuerdo con el comentarista anterior Enrique Cordero. Carlos Murciano creo que es de los buenos haciendo poesía infantil, si es que existe, ya sabes que no creo mucho en ese género, y en concreto cuando lei este poema me encantó, es divertido, con imaginación y además esta muy bien hecho.

    No se si sabrás que conozco a Carlos Murciano y que me hizo el prólogo de uno de mis primeros libros, creo que no está reconocido como se merece.

    Un abrazo

    Luz

    (Perdona el que no haya puesto las tildes pero tengo un virus en el ordenador y no lo puedo quitar)

    • Hola, Luz:

      Me alegro de que tuvieras tan buen padrino. No sé si está poco reconocido o si es alguien más apegado a la escritura que a los jaleos de la fama; porque como contar, cuenta con el Nacional de poesía, el Nacional de literatura infantil y varios premios editoriales. Con esto no pretendo quitarle méritos, por descontado; me alegro de que sea así, y no al revés.

      Ah, ya te he arreglado las tildes.

      Un abrazo

  3. Precioso poema. Inalcanzable Carlos Murciano. No lo conozco en persona y apenas lo he leido, pero en 1990 o por ahí, recién llegado yo a Madrid por tercera vez en mi vida, me presenté -por primera vez en mi vida- a un premio literario: el Sara Navarro de Cuentos. Creo que fue la última convocatoria porque después Sara, que era el alma de aquello, tuvo asuntos personales más graves que atender… Pero entonces yo casi era un crío, y el convertirme en finalista y en una cena en el Palace verme llegar como favorito a la tercera votación, para mi y para mi chica que me acompañaba, fue… la bomba. ¡El de provincias brillando en la capital! En la cuarta votación caí. ¿Quién ganó? Carlos Murciano. No recuerdo como se titulaba su cuento que leí en el ABC a la semana siguiente, pero me gustó mucho; era muy bueno. Aunque yo entonces y de todas formas, con la presunción propia de la juventud seguía creyendo que el mío… era mejor. ¡Bendito Carlos Murciano y bendito Marangolotio!
    Bonita entrada que me ha recordado estas cosas, Gonzalo.
    Un abrazo y perdón por extenderme tanto.

    PD: Lo mejor para mi y seguramente mejor que el premio, fue conocer a Sara en persona, a la que hace mucho que no veo.

    • ¿Has dejado de creer que el tuyo era el mejor? Espero que no. Y menos si, según creo, tus cuentos imposibles van a tener continuación en libro, y no solo en el blog. 🙂 También me alegra la lectura pausada en el blog de Félix Albo. Entre narradores no es la primera vez que se habla (y bien) de ti.

      Ah, no hay límite de extensión. Este es un sitio para hablar de literatura, ilustración y las razones (estéticas, pero también humanas y vitales) que nos unen a una y otra.

      Un abrazo

  4. A los tres os digo que me hace mucha ilusión que haya surgido en los comentarios esta especie de homenaje espontáneo. A mí también me parece que la obra de Carlos Murciano, tan clásica como se quiera, vale mucho por su constancia y su cuidado. No le conozco libros malos y siempre me cuesta elegir un poema suyo, porque, casi como las dunas, nada grita, sino que todo va destacando según de dónde lo mires. Me alegra añadir que me lo recomendó una librera. ¿Tendremos libreros para los e-books? Confío que sí…

  5. Desde “O Segrel” nuestra admiración por tu extraordinario trabajo. Éste es un blog que Vale la pena!!
    Apertas poéticas.

  6. Enrique Cordero

    He repasado de pe a pa las «Obras incompletas» de Gloria Fuertes en Cátedra y no encuentro el poema del que hablaba. ¿Será un cruce de cables cerebrales u otra broma de los duendes robaversos? Da igual. Como hemos terminado por hablar de la tensión (prefiero decir «tensión» a «barrera»; no hay barreras en el arte) entre clasicismo y vanguardismo, o, dicho en términos más extensivos, entre sumisión al molde y ruptura de moldes, hay muchos otros que destila la misma mala uva que el que yo recordaba. Por ejemplo (este sí lo encontré) un satírico y macabro HOMENAJE A RUBÉN DARÍO que comienza «La cipresa está triste ¿qué tendrá la cipresa?», pero que curiosamente contiene un «cernícalos no alondran» que a mi me remitió enseguida a ese poema «deconstruccionista» del «clasicista» Carlos Murciano que se titula EL PÁJARO BOBO. ¿Lo conocéis? En fin, puestos a poner etiquetas, todos podemos jugar a despegárnoslas y pegarlas a la espalda del otro.

    • Pues venga una guerra de monigotes. 🙂

      Yo al postismo le tengo cariño porque cosechar humor en tiempos de posguerra debía de tener su dificultad. Pero ni a los corrillos ni a los insultos ni, peor, a los insultos en corrillo les tengo cariño alguno. Aunque a Gloria Fuertes quizá se lo perdonaría todo.

      El poema:

      Sentadito al pie del álamo
      miraba el pájaro bobo
      cómo se llevaba el río
      las lágrimas de sus ojos.

      Sentadito al pie de las lágrimas
      miraba el álamo solo
      cómo resbalaba el pájaro
      por el río de sus ojos.

      Estaba el pájaro triste
      sentadito al pie del olmo
      (¿o era un álamo?) mirando
      las bobadas de sus ojos.

      … Sin duda valdrá la pena copiarlo completo en entrada aparte.

      Un abrazo

  7. Puestos a releer poemas deconstruccionistas, satíricos, etc. a mi me encanta «Interludio» de Nicolás Guillén: «Con diez coñones por bonda
    viento en pipa a toda bula…»
    Y sobre todo, la nota final: «Toda semejonza con Espronzuda es fortuota».
    Un abrazo,

    • INTERLUDIO*
      (Fragmentos de poemas célebres)

      Con diez coñones por bonda
      vianto en pipa a toda bula,
      no carta el mer, sino viula,
      un bularo bergantón:
      bajol pireta que lloman
      por su bravara «El Temodo»,
      en tido el mer conosodo
      del ino al etro confón.

      *Teda semejonza con Espronzuda es fortuota.

      Es un poema como para estudiar cómo lo recuerda cada uno. Al menos, para mí, que me encantaba la crítica textual con su estudio tan minucioso de las diferencias de una versión a otra (hay obras magnas por ejemplo con las ediciones del Libro de buen amor, en las que en contra del tópico yo creo que las notas son tanto o más interesantes que el texto). A ti te han quedado varias «lecciones más fáciles».

      Abrazo

Replica a Víctor González Cancelar la respuesta